Los castillos del Loira en bicicleta.
¡Un viaje en bicicleta por los castillos del Loira es una experiencia inolvidable que no te puedes perder! ¿Las razones?
Explora los castillos más bellos de Francia: En tu viaje en bicicleta podrás descubrir algunos de los castillos más hermosos de Francia, como el impresionante Château de Chambord, el majestuoso Château de Chenonceau, el elegante Château d’Azay-le-Rideau, y muchos otros más.
Vive una experiencia única: Recorrer en bici los caminos que conectan los castillos del Loira es una forma única de sumergirte en la historia y la cultura de esta región. Podrás pedalear por las mismas rutas que en su día recorrieron reyes y reinas, y descubrir los secretos de una época dorada de la historia francesa.
Naturaleza y paisajes impresionantes: El valle del Loira es conocido por su belleza natural y sus paisajes impresionantes. En tu viaje en bicicleta podrás disfrutar de la tranquilidad y la serenidad de los bosques, ríos y campos que rodean a los castillos.
Flexibilidad y libertad: Viajar en bici te permite tener una gran flexibilidad y libertad para elegir tu propio ritmo de viaje y descubrir cada rincón a tu propio ritmo. Además, tendrás la oportunidad de conocer pequeñas aldeas y pueblos que normalmente no se incluyen en los itinerarios turísticos tradicionales.
En resumen, un viaje en bici por los castillos del Loira es una oportunidad única para explorar la belleza, la historia y la cultura de esta región de Francia de una manera activa y emocionante. ¿Te animas a pedalear por los castillos más bellos de Francia?
Aquí te damos las claves:
Datos de interés.
Con inicio en Orleans y final en Nantes, esta ruta transcurre por carreteras muy poco transitadas, segregadas y alguna que otra pista siguiendo el cauce del río Loira y por el que encontrarás bellos castillos, pequeños pueblos y fantásticas ciudades donde pernoctar. Disfrutar de la gastronomía del país vecino así como de la amabilidad de sus gentes es un valor añadido a esta ruta.
Consta de 385 kilómetros de longitud y es un recorrido muy fácil para realizar con tu bici y unas bolsas de bikepacking, por el tipo de terreno y la casi inexistencia de desnivel.
Dispone de todos los servicios ya que pasa por numerosas localidades.
Para llegar hasta Orleans, punto de partida, nosotros lo hicimos en furgoneta desde Girona, dejándola varios días en el jardín de una casa de huéspedes, exactamente en Coffret d Ávenir en la que pasamos la noche previa, y al llegar a Nantes, punto final del recorrido retornamos con la excelente red ferroviaria francesa, que nos devolvió a Orleans, para así recoger de nuevo la furgoneta y volver a casa.
Historia de los castillos del Loira.
Los castillos del Loira están situados en la región Centro (Turena, Blésois, Orléanais, Berry) y también en el País del Loira (Anjou). La mayor parte de los castillos fueron edificados en el Renacimiento francés (siglos XV-XVI), aunque sus orígnes están en la Edad Media, de la que se conservan trazas arquitectónicas importantes. Habitualmente, se consideran unos 42 castillos los llamados «Castillos del Loira». Esta concentración de monumentos en esta región es lo que ha justificado la declaración del «Valle del Loira» como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, entre Sully-sur-Loire (Loiret) y Chalonnes-sur-Loiret (Maine-et-Loire).
Las etapas.
Orleans – Blois. 81 kilómetros.
En nuestra primera etapa de los castillos del Loira en bicicleta, salimos desde Orleans y vamos en dirección al Atlántico. Tras rodar tranquilamente por los numerosos carriles bici muy bien indicados de la ciudad y tomar las fotos pertinentes, cruzamos por primera vez por un puente el río Loira, (será una constante a lo largo de la ruta) y nos adentramos por caminos y carreteras muy tranquilas y con unos paisajes excepcionales. La gran importancia artística y cultural de toda la zona le da un valor añadido a esta etapa.
Un par de hora después de salir, llegamos a Meung-sur-Loire, un bonito lugar para hacer una parada. Encontramos una cafetería enfrente de la iglesia en plena plaza.
A unos 20 kilómetros de la llegada, encontramos una carretera que lleva hacia el Chateaux du Chambord, nos desviamos de la ruta original y vamos hacía allí siguiendo las indicaciones. Resulta difícil perderse ya que además de los carriles bici bien indicados, hay abundantes letreros con información referente al castillo. Y llegar allí es impresionante. Tras la visita pertinente, desde el castillo hasta la localidad de Blois es un pequeño paseo entre viñedos y pequeñas localidades.
Blois – Tours. 74 kilómetros.
Callejeamos un poco por Blois, cruzamos el puente sobre el río Loira y cogemos un camino asfaltado realmente bueno y sorprendente por sus paisajes, hasta llegar a la ciudad medieval de Amboise, parada obligatoria de esta etapa, en la que podremos visitar la casa de Leonardo da Vinci o el castillo de Amboise.
Justo en las afueras de la ciudad está la Pagode de Chanteloup, una pagoda china de 44 metros de alto construida en 1775 por el duque de Choiseul. Tiene siete pisos, cada uno de ellos ligeramente más pequeño que el anterior. Una escalera interior alcanza todos los niveles y está abierta al público.
Tours – Saumur. 86 kilómetros.
Salir de Tours a través del Jardín del Lago es un verdadero espectáculo. Un lugar que a primera hora de la mañana emana una paz inusual, y con una luz preciosa muy típica del norte de Francia.
Dejando atrás el parque seguimos la riba a través de caminos asfaltados, algunos de pista, y algún pequeño tramos de carretera segregada, siempre secundarias. Una delicia de etapa, muy tranquila y de la que en todo momento te puedes entretener a disfrutar del paisaje.
Savonnières es el lugar escogido para tomar un café y un delicioso dulce típico de la comarca, y nos sentamos a disfrutar de las vistas al pequeño puerto de esta localidad.
Unos Kilómetros más adelante, la siguiente parada es le Chateaux d’Ussé, parada obligatoria para la visita de este lugar, en el pueblo de Rigny-Ussé.
Tras este receso, un cruce nos da dos opciones oficiales: Seguir por la ribera del río Loira o ir a través de los viñedos. Estamos en una región muy rica tanto por sus vinos como también por sus cervezas artesanales, así que decidimos salirnos del track que llevamos para transitar entre viñedos y así cambiar un poco de paisaje. Os recomendamos que vayáis por aquí.
Saumur – La Possonière. 75 kilómetros.
Antes de irnos de esta bonita ciudad, decidimos visitar le Chateaux de Saumur. Cinco minutos a pie desde el hotel nos separa de este. Los jardines se pueden visitar sin pagar entrada y aprovechamos para hacer unas fotografías tanto del castillo como de las vistas de la ciudad entera, como no, con el río Loira de principal protagonista.
De nuevo se transita entre carreteras y caminos muy bien señalizados y cómodos. Un lugar que merece una parada en esta etapa es Le Thouriel. Una zona muy pintoresca, pequeña y con un estilo arquitectónico muy romántico. Barcas amarradas en los embarcaderos flotastes y justo enfrente el café La Route du Sel. Lugar obligatorio de parada para tomar un café.
Tras este pequeño receso, seguimos en ruta entre viñedos, paralelos al río Loira, pasamos por Trelazé y también por Angers, un buen lugar donde parar a dormir por toda su oferta cultural, pero nosotros seguimos hasta la localidad de La Possonière, en donde dormimos en una casa de huéspedes que resultó ser una inmejorable experiencia.
La Possonière – Nantes. 74 kilómetros.
Última etapa de los castillos del Loira en bicicleta. En dos kilómetros desde donde hemos pasado noche nos ponemos de nuevo sobre el track. Poco a poco, dejamos viñedos atrás para volver a rodar paralelos al Loira, pero antes cruzamos el puente que pasa sobre la Isla de Chalonnes, que es la mayor isla habitada del Valle del Loira.
Paramos en Saint Florent le Vieil a hacer un café y visitar el castillo local y la iglesia. Subimos a un mirador en donde las vistas de todo el valle son impresionantes, y de nuevo retomamos el camino que transcurre paralelo al río Loira hasta poco a poco ir llegando a Nantes. Punto y final de este magnifico recorrido de los castillos del Loira en bicicleta.
Alojamientos.
Orleans
Para la primera etapa escogimos reservamos una Chambre d’Hôstes Le Coffret de l’Avenir en un pueblo a 6 km de Orleans, St. Denis des Val.
Resulta muy agradable alojarte en casas de huespedes si tu filosofía de viajar en bicicleta, incluye conocer gente y sus costumbres.
Blois
En esta ocasión, nos alojamos en hotel Le Monarque, muy recomendable tanto por la simpleza de sus habitaciones, situación y amabilidad del personal.
Además dispone de un lugar para guardar las bicicletas. El desayuno es buffet libre, variado y muy bueno.
La temática del hotel está basada en el famoso personaje de Tintín, personaje de Hergé, y está muy bien lograda, amén de ser divertida.
Tours
Os recomendamos este Hostel Hostel Etapa 84 porque además de temática ciclista, disponen de una BikeRoom fantástica y un carrito de herramientas para uso de los clientes.
En cuanto a las habitaciones silenciosas y con un buen desayuno. Muy básico y simple, pero suficiente.
Y su ubicación, ¡es perfecta! A 5 minutos del centro en la avenida principal.
Saumur
El hecho de que El Patio estuviera en el paseo fluvial, y a unos 5 minutos del centro de Saumur, se notó también a la hora de descansar. Una habitación espaciosa y muy silenciosa.
El desayuno fue fantástico; zumo natural, cereales, yogures, mermeladas y como no podía ser de otra manera, baguette y croissant…Romain, su propietario, nos explicó lugares pintorescos que nos esperaban en la ruta del día. Lugares donde parar a hacer un buen café o incluso picar algo y algunos de los pueblos con encanto que podíamos visitar.
La Possonière
Para finalizar, nos alojamos en Loge & Broc que resultó ser una casa de huéspedes fantástica.
Casa típica francesa, con un jardín inmenso y un anexo que era el taller de Laure, la propietaria. Se puede cenar previa reserva, aunque nosotros escogimos alojamiento y desayuno, que resultó espectacular, como en todas las casas de huespedes, compuesto por productos caseros como mermeladas, pan y croisanes recién hechos.